Reto. Fuego en las palabras: Febrero 2019- Un respiro

Hola a todos bienvenidos una vez más a Enredados entre Libros y antes de empezar diré que estoy muy emocionada por fin termine de publicar todo lo que tenía rezagado, espero no volverme a trazar tanto, fueron un par de semanas medio intensas, pero ya vuelvo a mis tres publicaciones semanales como siempre.

Ahora bien, el día de hoy les traigo el reto Fuego en las Palabras que es organizado por Rebeca del blog Crónicas de una loca que cazaba nubes, disfruto mucho de participar en este reto y sobre todo porque Rebeca es fantástica y me ha ayudado a ir mejorando poco a poco en lo que escribo y sobre todo en corregirme en algunos horrores ortográficos o de redacción que se me van, lo cual agradezco mil ya que me ayudan a mejor.

Volviendo al reto el requisito para este mes es el texto o poema que vayamos a crear contenga el tema: ALIGERAR EQUIPAJE. Yo le entiendo que en vez de utilizar estas palabras debemos crear algo con esta temática de dejar las cosas nos detienen o nos impide dejar algo atrás, en base esta interpretación les dejo mi creación, esperando que les guste y las sugerencias siempre son bienvenidas.

UN RESPIRO

Mis piernas no dejan de temblar de los nervios a la vez que mis padres me observan, puedo ver la incertidumbre en sus miradas mientras le echan un ojo a la maleta que he dejado en el recibidor. Respiro un par de veces preparándome mentalmente para contarles, sé lo que ocurrirá en cuanto se lo diga, lo tengo bien asimilado. Ya me puedo imaginar el drama, pero aun así estoy decidida.

Les cuento todo y al momento de salir esas palabras el equipaje que llevo a cuestas se aligera un poco, tal como lo imagine mi padre me da una bofetada a la vez que me insulta llamándome machorra, mujerzuela, zorra entre otros insultos y mi madre se lleva las manos al rostro y llora desconsoladamente. Después de unos minutos escuchando y presenciando esa escena que me mantiene inmóvil en mi lugar, decido alejarme de todo eso, tomo la maleta y sigo el consejo de mi padre. Me voy de la casa.

Las mejillas me arden, ya no puedo contener el llanto. Sabía lo que ocurriría aun así no puedo evitar que me duela. El olor a flores silvestres me envuelve junto con unos brazos cálidos y amorosos. Me susurra que todo estará bien, levanto la mirada y la miro. Sin duda es la mujer más hermosa que he visto en mi vida y sin más la abrazo con todas mis fuerzas. No tengo pensado dejarla ir, pase lo que pase y espero que algún día mis padres acepten que su hija se ha enamorado de una mujer.

Esto es todo por mi parte, me encantaría conocer su opinión y nos vemos en la próxima entrada de Enredados entre Libros.