lunes, 26 de mayo de 2025

VadeReto: Mayo 2025- La cueva

VadeReto: Mayo 2025- La cueva

¡Hola a todos! Bienvenidos nuevamente a Enredados entre Libros. Hoy les traigo mi participación en el VadeReto de este mes de Acervo de Letras, les dejo AQUÍ el link para que revisen la base del reto.

La propuesta para este mes se dedicada a la: OSCURIDAD.

Y las condiciones de este reto son:

Los protagonistas de vuestros relatos han de vivir un escenario lleno de Tinieblas, Negrura, Tenebrosidad, Opacidad

Podéis desarrollar la trama en una noche sin luna, dentro de una cueva profunda, en una habitación sin ventanas, dentro de una caja…

Puede ser una oscuridad completa y opresiva, pero, también, deseada y reconfortante.

Un escenario lleno de sombras o escasamente iluminado por velas que creen una atmósfera de tinieblas.

No tenéis, obligatoriamente, que trabajar el terror, la tristeza o la melancolía.

Fue un reto considerable, pero al final me decante por un relato de terror, que espero que les guste:

﹀﹀﹀ •   •   • La cueva━━━

La oscuridad era como un animal hambriento, una boca inmensa que intentaba tragarlos enteros con cada paso torpe que daban. La linterna en la mano de Jazmín era su única amiga en esa negrura sólida como roca, proyectando un tembloroso círculo de luz que apenas arañaba la superficie de las sombras. A sus espaldas, el eco profundo y áspero de la cosa que los perseguía vibraba en las paredes de la cueva, un latido siniestro que les gritaba que siguieran adelante, aunque no pudieran ver nada. Era un sonido sin forma clara, una mezcla de algo arrastrándose y golpeando, tan antinatural que les helaba la sangre en las venas.

Marcelo, siendo tan alto, no cabía bien en los pasadizos estrechos y tropezaba a cada rato con rocas ocultas. Sus maldiciones quedaban atrapadas en el aire denso que los sofocaba. Lidia, la más pequeña, se agarraba a su mano con una fuerza asombrosa, sus deditos tan tensos que estaban blancos. El lugar se sentía como una habitación sin ventanas, una cárcel de piedra húmeda y fría donde cada respiración era como tragar tierra, y un olor metálico, un poco repugnante, flotaba en el aire.

"¿Por dónde?" La voz de Marcelo era un susurro ronco, que la oscuridad se tragó casi al instante.

Jazmín, con los ojos casi cerrados por el esfuerzo, movió la linterna. Las paredes irregulares bailaban en la luz temblorosa, mostrando formas extrañas talladas por el tiempo y la oscuridad. Parecían acercarse, como si fueran a aplastarlos con su abrazo de piedra. La oscuridad era tan espesa que los bordes de la luz se desdibujaban, devolviéndolos a la negrura total cada vez que Jazmín parpadeaba nerviosamente.

El ruido se hizo más fuerte, ya no solo un eco lejano, sino algo que podían sentir, una presencia que vibraba en el suelo bajo sus pies. Era como si la cueva misma estuviera viva, quejándose por la cercanía de su perseguidor. Un escalofrío recorrió la espalda de Jazmín, una sensación profunda de que lo que los seguía no era normal.

"No sé," respondió Jazmín, su voz apenas un hilo de sonido. "Solo… sigamos."

Se metieron por un túnel aún más angosto, la roca áspera arañando sus ropas, y el aire se volvió más pesado, casi imposible de respirar. La sensación de estar atrapados, sin ver una salida, empezaba a debilitar sus ganas de seguir. La oscuridad era completa; si la linterna dejaba de funcionar, estarían perdidos en un laberinto infinito de piedra y sombra.

De repente, Lidia se detuvo, jalando la mano de Marcelo. "¿Escucharon eso?"

Un silencio tenso cayó sobre ellos, solo roto por sus respiraciones agitadas. El ruido había desaparecido. Por un momento, una pequeña esperanza floreció en sus pechos. ¿Se había rendido? ¿Los habían perdido en este laberinto de túneles?

Pero la esperanza se desvaneció tan rápido como llegó. Un nuevo sonido emergió de la oscuridad: un goteo lento y constante, seguido de un suave chapoteo. Delante, la luz débil de la linterna mostró un brillo oscuro y quieto: un charco, o tal vez algo más grande.

"Un lago," murmuró Marcelo, con un tono de rendición en la voz. Otro problema más en su desesperada huida.

Mientras rodeaban con cuidado la orilla fangosa, el ruido regresó, esta vez más cerca, resonando con una urgencia que les erizó la piel. La criatura, lo que fuera, no se había dado por vencida. Los estaba acorralando en esta prisión subterránea que los asfixiaba.

Jazmín levantó la linterna, iluminando por un instante el techo curvo. Goteras persistentes caían en el agua oscura, creando círculos que parecían mirarlos fijamente. La oscuridad a su alrededor era una amenaza constante, esperando el momento en que la luz temblara para tragarlos por completo.

Sabían que no podían detenerse. Cada segundo que perdían los acercaba más a lo desconocido que los perseguía en la oscuridad de la cueva. Tenían que seguir adelante, confiando en la luz tenue y en la esperanza cada vez más débil de encontrar una salida en este laberinto de sombras. La asfixiante habitación de piedra parecía no tener fin, y el aliento de la criatura se sentía cada vez más cerca en la negrura agobiante.

────────────────────


Con esto concluimos el día de hoy, me encantaría conocer su opinión al respecto.


¡Nos vemos en la próxima, chao!

VadeReto: Mayo 2025- La cueva

 

 


16 comentarios:

  1. Oh, so intriguing! Great imagery. Such suspense! Glad you were up for the challenge.

    ResponderEliminar
  2. I don't necessarily like caves, but I have dreams about them..so i t was great to read your story.

    ResponderEliminar
  3. Oh, this one had such a C-drama feel...since I have seen so many stories where people go into caves. Really interesting story..will you continue it? All the best to your creativity!

    ResponderEliminar
  4. Hola :)
    Te ha quedado genial, la temática de este reto me ha encantado.
    Besos

    ResponderEliminar
  5. HOla
    Ya te lo he dicho, tienes una creatividad maravillosa.
    Un bes💕

    ResponderEliminar
  6. ¡Hola!

    ¡Menuda angustia y qué final, nos has dejado ahí con el nudo en la garganta! ¡Genial reto!

    Nos vemos entre páginas
    La vida de mi silencio

    ResponderEliminar
  7. Hola, Cecy.
    Un cuento asfixiante que te oprime como la misma cueva. Al menos, para mí que soy algo claustrofóbico.
    Nos dejas con muchos interrogantes, sin saber quienes son los chicos, qué o quién les persigue y, lo más importante, cómo termina la historia.
    No sé si la seguirás en fechas próximas o dejarás que sea nuestra imaginación la que les permita salvarse o muestre al monstruo en toda su magnitud y, ¿por qué no? Se haga protagonista absoluto del cuento.
    Felicidades. Una oscuridad acongojante para nuestro VadeReto.
    Abrazo Grande.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por el comentario, la verdad no habia pensado en escribir otra parte del relato, saludos

      Eliminar

Gracias por visitarme. Me encantaría saber lo que opinas de este tema, por favor déjame tu comentario.

Este blog siempre devuelve los comentarios, así que puedes activar las notificaciones para seguir la conversación.